Situado en pleno centro de Mérida, Yucatán, el restaurante gastronómico Huniik es el espacio intimista del chef Roberto Solís. Lo que promete: sumergirle en el patrimonio yucateco, sus tradiciones y su territorio. La arquitectura y la decoración, inspirada en los cenotes mexicanos, son obra de Jorge Pardo, artista cubano y copropietario. Van en consonancia con la filosofía y el deseo de compartir que mueven a Roberto Solís. Aquí no hay paredes ni barreras. Asista al ballet que tiene lugar en la cocina, donde el chef y su equipo preparan platos de influencia yucateca espolvoreados con un toque de modernidad. El restaurante, comprometido con la conservación del medio ambiente, trabaja codo con codo con pequeños productores locales y en su carta únicamente tienen cabida los productos de temporada y característicos de la región.