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Sentarse a la mesa de la Maison Lameloise, es, ante todo, deleitarse con la oferta culinaria de Eric Pras. Para nuestros huéspedes de una noche o más, el menú degustación es la promesa que permite saborear todas sus facetas. Para los viajeros de paso, el menú del almuerzo será la ocasión perfecta de hacer una parada gourmet en Chagny.
La experiencia Lameloise es también la de la Borgoña: la carta de vinos se dirige lógica y resolutivamente hacia los numerosos climas que componen esta excepcional región: de las 900 referencias de nuestra selección, más de dos tercios son borgoñonas, de las cuales, una treintena de Meursault, una cuarentena de Gevrey-Chambertin... y nuestra amada costa chalonesa ocupa también un lugar privilegiado.
Si disfruta de los placeres de la conducción, tiene en su mano la oportunidad de recorrer la antigua ruta nacional 6, por el cercano pueblo de Saint-Aubin. Bordeada por viñedos en laderas, esta parte de la "ruta del sol" ofrece un auténtico cambio de aires. En el recodo de una curva, aparece a continuación, y como surgido de un sueño, el castillo de La Rochepot, una maravilla arquitectónica de la Borgoña.